debe haber trabajo para todos

Remitiendo a los medios de comunicación de toda España, una carta abierta a los trabajadores de la once, en la que afirman que“debe haber trabajo para todos“

Nos dirigimos a los trabajadores de la ONCE porque concentraciones previas bajo ese mismo lema ya han concluido con gritos, críticas e insultos contra la OID, y debemos salir al paso de unas manifestaciones que se equivocan de objetivo.

Somos conscientes de la difícil situación que atraviesan, pero entendemos que un sindicato debe luchar por la igualdad de todos, por el derecho a un trabajo digno y, en este caso, especialmente por la integración de todos los discapacitados en la vida laboral. No somos nosotros quienes estamos “poniendo en riesgo” los puestos de trabajo de los vendedores de la ONCE.

Creemos que este conflicto no es contra nosotros, sino frente a su propia organización, que concede la venta del cupón a estancos, bares, gasolineras, etc… entrando en competencia desleal y directa con sus propios trabajadores.

Desde la OID conocemos desde hace tiempo estas quejas y la presión y las penalizaciones a las que están siendo sometidos si no logran unas ventas mínimas muy difíciles de alcanzar, en clara contradicción con los múltiples beneficios y cuantiosas subvenciones del Estado que recibe su organización.

Los trabajadores de la ONCE son un colectivo de 20.000 vendedores, mientras que en la OID damos sustento  a 4.000 familias discapacitadas, muchas de ellas en claro riesgo de exclusión social, a las que el Estado no nos permite dar de alta en la Seguridad Social, y a los que la policía acosa, incauta boletos y hace la vida imposible. Y a las que la ONCE, si la OID desapareciera, tampoco daría trabajo como ya demostró en su día.

La  ONCE lanza a sus trabajadores a la calle para clamar porque en España quede una sola organización en régimen de monopolio, como hasta ahora, pero en nuestra opinión hay cabida para todos y nunca será bastante la ayuda y el apoyo que seamos capaces de generar para los discapacitados españoles, ya que sus necesidades y la atención que precisan rebasa la capacidad de una sola organización.

Porque se estima que en España viven ochenta mil personas Invidentes, mientras que la cifra total de los discapacitados físicos, intelectuales y sensoriales supera los cuatro millones de personas, y de éstos, el 64 % se encuentra en el paro.

Tampoco nos sentimos identificados con lo que el lema de la campaña denomina “juego Ilegal”. El juego no es ilegal en España y lo que debería estar es regulado. El Estado no nos da el título habilitante para ejercer el juego benéfico en igualdad de condiciones con la ONCE, contradiciendo la Constitución Española y las normas antimonopolio europeas.

El juego de los dos colectivos es el mismo, sólo que el monopolio establecido por el Estado a favor de la ONCE discrimina a los discapacitados físicos, intelectuales y sensoriales frente a los invidentes, no dejándoles vender los boletos por falta de una autorización administrativa.

La OID no “pone en riesgo” ni “engaña” tampoco a ningún consumidor. Jamás ha dejado de abonar ni uno solo de sus premios en sus más de 23 años de su actividad.

Por todo ello, y en la creencia de que es más importante lo que nos une que lo que nos separa, nosotros también plantamos cara a éste y a cualquier Gobierno que favorezca la desigualdad entre discapacitados y le exigimos que actúe:

Exigimos al Gobierno que reforme la ley del Juego que concede este privilegio de la venta del cupón benéfico sólo a la ONCE.

No estamos contra la ONCE, aunque hayan iniciado esta guerra contra la OID, sino a favor de trabajar en igualdad de condiciones. Una sola organización, que además ahora está despidiendo trabajadores, no es suficiente para atender las necesidades de los más cuatro millones de discapacitados españoles.

Luchamos en los tribunales contra el monopolio del juego en España, que otorga en exclusiva los sorteos benéficos a la ONCE, sin fundamento alguno que pueda éticamente cobijar, bajo la capa de la solidaridad, a una sola organización.

Pedimos y exigimos al Gobierno que inicie un camino de diálogo entre ambas entidades, para poder resolver la situación y nuestra normalización como la asociación legalmente constituida e inscrita en el Ministerio del Interior que somos, y al corriente del pago del Impuesto de Actividades Económicas, y hasta ahora con 135 Resoluciones Judiciales a favor de la OID , en lugar de provocar tensiones entre los discapacitados de ambos colectivos, por una errónea forma de concebir como un gran monopolio este sector del Juego benéfico en España.