Alrededor de un millón y medio de personas mayores pasarán este año las fiestas navideñas en soledad, una situación que geriatras y psicólogos desaconsejan por ser a veces el desencadenante de una depresión que ya estaba latente y que en esta época se precipita.

Según la Sociedad Española de Médicos de Residencias (Semer), en torno al 20% de las personas mayores de 65 años que viven en sus casas están deprimidas en mayor o menor medida, una cifra que, no obstante, se incrementa en ocho puntos en el caso de los ciudadanos de edad institucionalizados.

El hecho de que la soledad sea uno de los desencadenantes de la depresión en el anciano y que, sin embargo, la cifra de afectados sea mayor entre los que no viven solos, se debe a que en las residencias se suele detectar y diagnosticar más el problema, como ha explicado a Servimedia María José Jiménez, presidenta de Semer.

La doctora Jiménez ha señalado que los trastornos depresivos en el anciano están a veces "infradiagnosticados" y que son, en muchas ocasiones, más cuadros seudodepresivos que depresiones propiamente dichas.

Sea como fuere, añadió, el problema está ahí y debe atenderse, intentando, por ejemplo, que las personas mayores que viven habitualmente solas pasen las fiestas navideñas en compañía, ya que si la soledad es un factor en sí mismo que causa a veces depresión, en esta época lo es más.

"Lo que más tarde se pierde es la memoria social", por lo que en Navidad las personas mayores rememoran su vida y las pérdidas que hay en ella, algo que, unido a la soledad habitual, puede acelerar la llegada de la depresión, indicó esta geriatra, que apuesta, por tanto, por la socialización permanente de estas personas, pero sobre todo en épocas como la Navidad.

En la misma línea que la doctora Jiménez se ha manifestado Guillermo Fouce, psicólogo social y presidente de Psicólogos Sin Fronteras, quien indicó a esta agencia que "la Navidad potencia las emociones" y que, por tanto, si se está emocionalmente bien, será una época de alegría y bienestar, pero, si por el contrario, el ánimo está bajo, lo que se potenciará será la negatividad.

"La soledad es quizá el principal factor determinante de una depresión", afirmó Fouce, que aboga, por este motivo, por que las personas mayores que viven solas se junten entre ellas, en residencias, hogares o en cualquier otro sitio, para pasar acompañadas las fiestas.

'NINGÚN MAYOR SOLO EN NAVIDAD'

Consciente de esta necesidad, la Federación Empresarial de la Dependencia (FED) ha puesto en marcha un año más su campaña 'Ningún mayor solo en Navidad', que ofertará plazas en residencias privadas para ancianos en Nochebuena y Nochevieja.

Promovida por las residencias y centros privados vinculados a la patronal nacional de la dependencia, la iniciativa está pensada "para personas independientes mayores de 65 años, deficitarias en relaciones sociales o que viven en soledad", tal y como ha apuntado José Alberto Echevarría, presidente de la FED.

El representante de los centros privados vinculados a la patronal de la dependencia ha explicado que se ofertarán plazas gratuitas en residencias los días de Nochebuena y Navidad, y en una segunda ronda el día de Nochevieja y Año Nuevo, a través de todas las asociaciones autonómicas de la FED.

De esta forma, los agraciados pasarán la Nochebuena o la Nochevieja, incluyendo la comida, la merienda y la cena, en una residencia y en compañía de otras personas, donde podrán participar si lo desean en todas las actividades que se desarrollen dentro del centro.

La campaña incluye hacer noche en la residencia y, en caso de ausencia de plazas libres en el centro más cercano, la vuelta al domicilio en transporte público o en taxi, según prefiera el usuario, que si pernocta en la residencia, deberá abandonarla en la tarde de Navidad o Año Nuevo.