Lo que se ha vivido en estos últimos cuatro días en torno al Racing sólo puede catalogarse como histórico, desde el no-partido de Copa, esa vuelta de los cuartos de final de la Copa del Rey ante la Real Sociedad, que emocionaron a toda España y gran parte del extranjero, supusieron el auténtico puñetazo sobre la mesa ante el despotismo, el secuestro y la ocupación que sufría el Racing por parte de Francisco Pernía con Ángel Lavín “Harry” como títere, ahí vimos a un equipo que no jugó un encuentro de fútbol, lo que hizo fue mantener la dignidad y de paso mandar un torpedo verdiblanco a la línea de flotación del barco de Pernía, ese barco que iba directo al abismo de la mano del personaje con alma marinera, el ya marcado de por vida “Harry”. Terminaba un jueves de orgullo, y todos teníamos la vista puesta en lo que sucedería el viernes en la Junta.

Y ahí llegamos, una Junta que se tuvo que celebrar bajo mandato judicial ante la última intentona desesperada de la indignidad por suspenderla, tiro desviado de los okupas, hubo Junta, y ocurrió lo que es esperaba, se acabó, se acabaron 3 años de guerra abierta, de lucha sin cuartel por parte de la afición, una afición a la que se la dejó abandonada a su suerte durante mucho tiempo, demasiado, y que pese a todo siguió luchando ante la injusticia, ese viernes 31 de enero comprendimos que las piedras a veces pueden con los tanques, las emociones que se vivieron no son descriptibles en negro sobre blanco, los que sois racinguistas podréis entender lo que se vivió al final de esa Junta.

Toca la reconstrucción, lo más difícil, aunque después de ver a peñistas y aficionados ayudando el sábado en taquillas, a ex trabajadores que fueron despedidos por la chusma, a trabajadores con 5 meses de sueldo a las espaldas, incluso a miembros del Consejo de Administración, todos juntos, ayudando para poder dar a basto vendiendo entradas por encima del horario estipulado, después de ver el domingo a 18.000 almas que vuelven a vibrar con ilusión ante una nueva etapa, después de ver a “Tuto” Sañudo poniéndose a trabajar desde el minuto uno, pudiendo escuchar el himno del Centenario por la megafonía del Sardinero y viendo como los jugadores y técnicos siguen haciendo machada tras machada, no me cabe duda, ha comenzado una nueva historia en el viejo Racing, a partir de ahora, comenzamos a contar desde 100.